Aruba quiere ser la principal isla del Caribe. Esto, por la importancia que tiene en la industria del turismo a nivel mundial. Pero, para lograr este objetivo, para el año 2020 el cien por ciento de su energía deberá ser “limpia”. La isla del Caribe sabe que cuenta con hermosas atracciones naturales, una envidiable agenda cultural y una efectiva unión de sus fuerzas vivas públicas y privadas en pos de lograr importantes objetivos para Aruba, su turismo, cultura y economía.

Los profesionales del turismo de Aruba tienen en claro cual es el plan de acción. Alguna de las medidas incluyen hacer que tanto los habitantes de la isla como los turistas sean concientes de la cuestión de la sustentabilidad. La razón de este cuidado es la conciencia que tiene una isla que vive de la naturaleza y del aprecio que el turismo mundial muestra hacia ese capital natural, para cuidarlo lo más posible en aras de preservarlo para las próximas generaciones.

Cuidar el mar, las playas y las demás maravillas de la isla asegurará la vital fuente de recursos que permiten atraer a miles de turistas durante todo el año. Estos cuidados requieren trabajo, esfuerzo, conciencia y también dinero. Un ejemplo de esta voluntad de cuidado por el medio ambiente lo constituye la reciente inauguración del Parque Vader Piet, el parque solar más grande del Caribe, localizado en el aeropuerto de Aruba, cuya construcción completa terminará este año. Es un buen ejemplo de la voluntad de las autoridades de la isla de erradicar las emisiones de CO2 en la isla y su dependencia de los combustibles fósiles.

Anualmente también se celebra la “Conferencia Verde”, a la que asisten especialistas de todo el mundo en la materia. Se implementó también un programa llamado “Mi Compromiso”, por el que todos los habitantes de Aruba deben aprender a ser buenos anfitriones para promover la llegada del turista y fundamentalmente su voluntad de difundir a la isla y de volver a visitarla.

Vía: Tourism Review
Imagen: Genius Energy